La primer calma, es densa, tiene muchas cosas acumuladas, viene cargada de pesadez, de silencio, podes prevenir que en cualquier momento va a llegar esa tormenta, es gris, es fría, la sentís pero no la disfrutas, es como que la llevas puesta encima, y te da pesadez, te sentís pesado, sin fuerzas, pero seguro esperando a que llegue esa tormenta.
Llega la tormenta y con ella arrastra un montón de cosas mueve todo moviliza todo, las cosas se desequilibran, cambian de lugar, no las podes controlar, no sabes como hacer para controlarlo, la sufrís, porque no tenes manera de pararla, y queres que pare, queres que las cosas vuelvan a estar estáticas como antes. que al menos las tenias en tus manos. Y de pronto cuando menos pensás cuando ya te acostumbraste a la idea de que no podes controlar todo eso y te resignas, el cielo se abre y sale el sol.
Y en ese momento que salio el sol, te das cuenta que la tormenta esa, se llevo todo lo malo que tenias, deja tirado todo lo que no te servia, todo lo que tenias que desechar, y mantiene a tu lado las cosas mas preciadas, las que realmente valen la pena, te sacas un peso de encima, se te aclara la vista, y te das cuenta que las cosas brillan mas. Y junto con esa tormenta se fue, todo lo malo que había antes todo lo que te molestaba en esa calma previa,
Recién acaba de terminar mi tormenta. Me siento renovada y mas tranquila. Llego esa tormenta y me dejo los aires renovados, siento que puedo respirar ahora.
Y le doy gracias a los que me soportaron quejándome durante la calma previa a la tormenta, porque sin ellos esa calma se que hubiera sido mucho peor.
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